jueves, 28 de marzo de 2019

La Pasión de Cristo de Mel Gibson: Lo que Verdaderamente Importa






La Semana Santa está a la vuelta de la esquina otra vez y con ello, llega a mi memoria la película La Pasión De Cristo,  de Mel Gibson.  Tremenda, impactante, dura, pero lo más cercano a la verdad, si nos tomamos el tiempo para investigar cómo eran en realidad las cosas en aquel tiempo.  Cuando vi esta película quede impactada: ninguna otra película sobre Jesús había movido mis sentimientos y emociones de la descomunal manera que esta lo hizo, confrontándome con lo que sufrió por mí y darme cuenta que no fue poco, ni sencillo, ni fácil lo que pasó, independientemente de lo crudo que les pareció a algunos en su momento.  Lloré a mares mirándola en el cine; rompió mis esquemas mentales y espirituales.  Desde ese momento, la magnitud del regalo que Dios me hizo, de su gracia  y amor por mí se reveló a mi vida con absoluta nitidez y fuerza, y sólo estoy segura de una cosa: Es demasiado grande para comprenderlo y asimilarlo.  Jamás he vuelto a ser la misma, ni mi vida espiritual tan irreverente y limitada. 

Luego de ver la película en cuestión, he tomado algunas notas de varios artículos que leí sobre el protagonista y quien hizo el papel de Jesús en ella.  Su actuación fue magistral, única, irrepetible, creo.  Su personaje, -al menos para mí- fue lo más fiel al carácter de mi Señor hasta entonces; su mirada (Jim Caviezel) supo plasmar en gran medida, la ternura, el amor y la paz de Jesús.   Este tema lo redacté el 27 de noviembre de 2012, pero humildemente creo es oportuno tocarlo también ahora.

Un extracto de diversos artículos sobre Jim Caviezel
Y la película La Pasión de Cristo

Jim Caviezel, el actor quien interpretó a Jesús en la película: “La Pasión de Cristo”, afirma que dicha filmación arruinó su carrera. Según él fue “rechazado por su propia industria” después de asumir el papel principal en la controvertida película de Mel Gibson lanzada en el 2004, aun siendo una estrella de la pantalla.  Cuenta que “Hacer este papel con Mel, destruyó mi carrera como actor, pero no me arrepiento de haberlo interpretado.  Ha sido una oportunidad única para fortalecer mi fe.  Dice que cuando Gibson le advirtió que de interpretar a Jesucristo, no volvería a trabajar otra vez en Hollywood él le contesto “Todos debemos arrastrar nuestras cruces”.   Desde la película, ha aparecido en un puñado de papeles sin relevancia y confiesa que  sabía que interpretar a Jesús seria arriesgado porque Jesús es tan  controvertido hoy como lo ha sido siempre, pero que eso no le preocupo.  Dice que su fe es y fue su guía,  tanto personal como profesionalmente.   ¿Es coincidencia que a sus 33 años de edad  lo llamaran para interpretar a Jesús?  Bromea,  diciendo que sus iníciales son las mismas que las de Jesucristo. ¿No les parece que es esto en sí mismo increíble?

Después de la película, entendió el sufrimiento mucho más, como nunca antes en su vida.  Durante gran parte de la filmación no estaba seguro de poder hacerlo, no sabía si la hipotermia le iba a impedir lograrlo. Luchar con la hipotermia por un día está bien, aunque fue sumamente duro. Pero intenta sobrellevarla por cinco semanas seguidas, en una cruz que sobresale por encima de los 300 metros, y cuando además tu hombro esta dislocado y estás enfermo, con neumonía y vomitando, y al mismo tiempo, eres alcanzado por un rayo. Todas estas cosas influyen en el momento en que gritas: “¿Dios mío, Dios mío, por qué me has abandonado?” “Yo dije eso muchas, muchas veces durante la filmación. Llega un momento en que te preguntas si a Dios le importaba que hiciéramos esta película o no. Pero ese es mi lado humano, porque sé que a Él (Jesús) sí le importó. Y si yo no hubiese pasado por todo ese sufrimiento no hubiera podido lograr la actuación que puedes ver en la pantalla. Esta experiencia me arrojó a los brazos de Dios”.

Su fe no implica que no interprete personajes pecadores, ni significa que no vaya a hacer películas con calificación R. Evidentemente, esta película tiene esa calificación. De hecho, si lees la Biblia le darías una calificación más severa -tal vez hasta X-, porque se trata de un libro muy serio lleno de muchos pecadores y muchos santos. Ha interpretado tanto personajes pecadores como personajes que fueron personas santas, pero siempre procura encontrar algo rescatable en las historias. Pero eso sí, dice: “no blasfemo contra nuestro Señor, y hay cosas en las películas que no haría. Y en esos casos sólo espero. Dios me permite esperar. Si encuentro un guion que me gusta, pero que contiene partes inaceptables para mí, les pido que lo cambien y si realmente están interesados en mi trabajo, lo cambiarán.

En su vida personal como casado que es, su fe es fundamental como la alimentación. “Tienes que comer todos los días; tienes que recibir la comunión.  Dios me entregó a mi esposa. Ella es un regalo. Yo la cuido, ella me cuida a mí. Nos encanta la manera en que Dios quiere que amemos. Tratamos de ser un ejemplo para las demás personas. A veces nos equivocamos,  pero seguimos intentando para luego levantarnos si caemos. Permanecemos juntos y nos amamos tanto como podemos. Mi fe alimenta todo, mi actuación y todo el resto. Es el alma de mi vida”.

"En la prensa, muchas veces se buscan ángulos para embarrarte. Por ejemplo, continuamente se refieren a mí como “el devoto católico Jim Caviezel”. Lo hacen cada vez que hablan de mí en la prensa, y uno piensa: “¿Qué hay de malo en eso?”. Pero déjame preguntarte algo, ¿dicen acaso "el devoto cienciologista Tom Cruise” o “el devoto judío Adam Sandler” una y otra vez? Ellos saben lo que están haciendo cuando intentan mancharte: buscan mostrarte como un “fanático religioso” que juzga y condena a los demás. Siempre ha existido este tipo de persecución  en todos los tiempos.  Cierta prensa no está muy abierta a cómo vives tu vida. Yo no voy e impongo mi fe a los demás. Hablo sobre ella cuando me lo preguntan y algunas veces ni siquiera hablo. Pero la vivo. No se trata de lo que dices; lo importante es lo que haces. Pero no puedo andar preocupado de lo que piensan los demás. Yo tendré que responderle a Dios. Sólo tengo miedo de no hacer lo correcto, porque tendré que rendirle cuentas a El algún día”.

Abunda evidencia en las páginas en Internet acerca de los frutos espirituales y testimonios de cambios de vida luego de esa película; están en todos lados. Pero lo que se escuchó y se le dio relevancia es sólo la historia de una señora que murió a causa de un ataque cardiaco mientras veía “La Pasión” en Kansas.  Los que quieren,  van a encontrar algo negativo entre los millones y millones de buenas cosas”. La mezquindad del ser humano?.


Yo recomiendo ver la película una que otra vez; nos permite sacudirnos de nuestra zona de confort y el adormecimiento espiritual en el que de vez en cuando terminamos cayendo.

Aquí  testimonio de Jim Caviezel:



Aquí un testimonio de uno de los actores (Barrabas):



Otro video interesante sobre la película.


Reflexionando:

Al leer esta historia, me admiro de que una persona que está en la cúspide de su carrera y la fama, le reste importancia a lo que se arriesga al tomar una decisión importante por defender su fe,  y realmente,  no debería asombrarme tanto: Cristo lo dijo y es lo que  espera que hagamos.  Cuando una persona confía en Jesucristo plenamente y vive su fe, no importa a lo que tenga que renunciar, (bienes materiales, prestigio, fama, amigos, reputación y el propio ego) todo le parecerá poco con tal de mantenerse en el camino y seguir a Jesús; como dice este actor,  arrastrar (cargar) su propia cruz.  A veces,  por hacer lo que Cristo espera de nosotros, tenemos que dejar de hacer lo que nos gusta y queremos hacer en el momento,  aunque sea una aparente nimiedad como quedarnos durmiendo el día de Culto o dejar de comprar algo que queremos o necesitamos por no dejar de ofrendar,  sin darnos cuenta que nuestras decisiones de cada día reflejan verdaderamente quién es nuestro Señor para nosotros.  Para tener el poder de ser un medio que Cristo use para transformar vidas, tenemos que permitir que Él nos transforme primero,  y eso empieza cuando realmente aceptamos que hacer su voluntad y agradarle es nuestra prioridad y un placer. 

No podemos dar culto o la gloria a las criaturas antes que al Creador, pero en este caso no sólo doy  gloria a Dios por su amor y misericordia y el permitir que esta película (pese a los innumerables obstáculos que enfrentó pudiera realizarse) sino bendigo a mi Señor por usar tan sabia y oportunamente a Jim Caviezel para ser un medio de bendición tan grande.

¿La película fue impactante? Sin duda. ¿Las actuaciones de Jim Caviezel y los demás estuvieron a la altura de lo esperado? Excelentes, ¿Costosa? Bastante. ¿Recaudó mucho? !por supuesto!;  pero...¿que nos dejó a nosotros? ¿De que nos sirvió haberla visto? 

¿Nos hemos tomado el tiempo para meditar en lo que Cristo sufrió en nuestro lugar, el dolor,  la impotencia y el ultraje que enfrentó? 

¿Cómo agradecemos a Dios el inmerecido y gran regalo de la salvación por medio de Jesucristo y su muerte en la cruz? 

¿Cuánto estamos dispuestos realmente a sacrificar o perder por seguir a Jesús? 

Eso es en resumen,  lo que verdaderamente importa.






martes, 26 de marzo de 2019

¡He vuelto!



Ha pasado un largo, largo tiempo,-demasiado dirían algunos- en donde no me he asomado a mi ventanita ni para tomar un respiro,  y me doy cuenta que en verdad ¡me ha hecho muucha falta!  Esto de escribir, reflexionar, plasmar mis ideas  en papel, desahogarme, sincerarme, o  hasta aligerarme la carga es realmente gratificante. Poder expresarme sin miedo a ser juzgada o incomprendida,  no tiene precio. Debido a razones personales de toda índole, que no vienen al caso ni hace falta tampoco plasmar aquí,   he estado alejada de este blog que significa tanto para mí y que amo,   pero aquí estoy; ¡He vuelto!

Aprovecho para dar una cordial y calurosa bienvenida ¡a mi primer seguidor! Gracias Moisés. Gracias por tomarte un tiempecito para asomarte a esta ventanita que podrá no ser muy grande pero que tal vez, solo tal vez, pueda darte un soplo de aire fresco.  ¡Dios te bendiga grandemente! Espero que sigamos contemplando el paisaje desde aquí, y encontrar un poquito de paz y alegría  para disfrutar esta vida, dura, complicada, difícil, y mil cosas más, ¡pero que a pesar de todo eso,  !sigue siendo bella!